Al profesor de tenis se le enseña a ser comprensivo, flexible y a adaptarse porque cada alumno es distinto, y aprende a su propio ritmo.
Pero nadie le hace ver al entrenador en qué aspectos nunca puede ser flexible, comprensivo, lo que jamás debe aceptar, transar, ni tolerar, ya que de lo contrario su condición de docente se ve menoscabada.
Nadie le enseña a cuidarse, ni preservar su oficio. Eso debe aprenderlo solo, a punta de errores.
A veces, para hacerse respetar humana y profesionalmente, hay que decir que no, ponerse firme, marcar límites y dejar claro quién es el que sabe y manda en la cancha. Pero eso tiene un costo.
A pesar de las consecuencias que eso conlleva, estoy convencido que no siempre hay que ser flexible. Debe existir un equilibrio entre rigidez y flexibilidad, pues ambas características resultan necesarias.
Siguiendo con el tema del equilibrio, me encanta la sicología positiva, y resaltar lo bueno, las cualidades y aciertos.
Sin embargo, creo que un profesor también debe abordar con sus pupilos los errores, los defectos, lo que no hacen bien. Es un trabajo que requiere coraje y que pocos realizan, para no “quemarse”, ser los villanos, personas incómodas o correr el riesgo que los jugadores los abandonen, pues no se les festeja todo.
Abordar aspectos negativos no tiene como fin hacer sentir mal a los alumnos, sino que tomen conciencia de lo que sucede, que sepan que deben y pueden cambiar, y que son capaces de hacerlo mucho mejor.
Conversar de lo positivo y negativo lleva al equilibrio. Combinadas, la flexibilidad y la rigidez, conducen a lo mismo.
Una raqueta consta de partes más rígidas (el marco) y otras más flexibles (las cuerdas). Para ofrecerle una experiencia óptima al jugador, ese implemento necesita en igual medida tanto la rigidez del marco, como la flexibilidad del encordado.
Para desarrollarse en armonía y equilibrio, los humanos requerimos algo similar: una mezcla de rigidez y flexibilidad. Una estructura. Estoy seguro que no siempre hay que ser como el agua, que se adapta a todo.
Arturo Núñez del Prado / Profesor de Tenis / Periodista / arturondp@gmail.com
