En el tenis, a veces se habla con términos rebuscados y lo simple se pasa por alto. Yo, en cambio, considero que los fundamentos básicos del tenis siempre son importantes, por lo que a continuación me referiré a un par de conceptos sencillos.
Para jugar tenis se necesita orden. Orden para atacar y defender. Orden mental. El jugador debe tener un orden interno y externo. Una mente con estructura, plasma un juego organizado en la cancha.
Cada tiro debe tener un propósito claro, encadenándose con el siguiente dentro de una secuencia lógica, de acuerdo al objetivo que se desea conseguir. Sin orden, el juego del tenista resulta confuso y no es eficaz, ni eficiente.
El orden otorga tranquilidad y es amigo de la planificación y la disciplina. Y ambos conceptos explican, en parte, el éxito la mayoría de las ocasiones.
En el tenis, hay momentos para atacar y otros, para defender. Sin embargo, veo que se practica bastante más el ataque, que la defensa.
Claro, atacar es mucho más entretenido y vistoso, por lo que puede que al jugador le guste más esa faceta.
Pero tanto el ataque como la defensa ostentan la misma relevancia, por lo que el tenista debe entrenarlos por igual. Un jugador que no sabe defenderse, no dominará el ciclo defender-neutralizar-atacar, clave para dar vuelta situaciones incómodas durante el desarrollo del punto.
A veces, también se puede contragolpear, pasando directamente de la defensa al ataque, sin neutralizar, pero eso constituye una excepción.
En el tenis, defenderse bien es un arte y una obligación. Una adecuada defensa permite ganar tiempo, junto con recuperar espacio en la cancha.
En ocasiones, no se requiere un gran tiro para defenderse de manera correcta, sino leer lo que pide cada jugada.
Y casi siempre, lo más simple es lo mejor.
Arturo Núñez del Prado / Profesor de Tenis / Periodista / arturondp@gmail.com
